sábado, 18 de diciembre de 2010

Labor de investigación

-Eres...raro.
María no dejaba de mirar al ser que tenía delante. Era claramente extraño bajo cualquier estándar; tenía la cabeza entre las piernas, y su cuerpo, cubierto de fino pelo violáceo, brillaba de forma multicolor. Tenía tres piernas, y caminaba dando extraños tumbos, ya que no coordianaba del todo bien. Verlo volverse era todo un espectáculo.
Además, su torso tentacular era claramente más pesado por un lado que por el otro, impidiéndole mantener un esquilibrio correcto. Las alitas que surgían de las parte más alta eran claramente inservibles.
-¿Por qué dices eso?-chilló el ser con su vocecita. Parecía dolido.
María miró la gran oreja tubular que surgía del centro de la cara e intentó enfocar sus ojos en el único globo ocular de la cosa.
-Eres...poco práctico.
-¿Qué quieres decir con "poco práctico"?-aulló el ser. Ahora no solo parecía dolido; también parecía enfadado.
-No puedes caminar bien. Te tambaleas. En clase me han enseñado la teoría de la evolución; solo sobreviven los más aptos. Y estoy segura de que si viniera un tigre te comería en un periquete, sin que pudieras correr y sin que te diera tiempo a decir-pensó cual sería la frase exacta-Encefalorraquídeo, por ejemplo.
El ser traqueteo sobre sus piececitos terminados en uñas del color del arcoíris y refunfuñó.
-¿Y si tu te encontraras con un tigre, qué?
La niña pensó.
-No me daría tiempo a decir nada-sentenció-Echaría a correr en vez de perder el tiempo con palabras largas.
-¡Oh, vamos!-chilló el ser, dándo un salto de unos cinco centímetros; estuvo a punto de volcar al aterrizar-¡No puedo creer que te estes comportando así!
La niña miró a su alrededor.
-Estoy segura de que en esa direción se encuentra el museo de Ciencias Acopladas Postoníricas. Vamos.
-¿Pero qué hay del parque de atracciones? ¿Que hay de las golosinas? ¿Que hay de echar a volar y jugar con los pájaros?
María le lanzó una mirada, y la mantuvo hasta que el ser apartó la vista. Después se volvió al horizonte de colinas color rosa.
-Este es mi sueño y hare lo que me dé la gana-dijo. Y añadió-Y es imposible que volemos; tu envergadura de alas es insuficiente para tu peso, y las personas no vuelan. Vamos.
Y echaron a caminar.

5 comentarios:

  1. Y así, continuó creciendo en edad, en sabiduría y en gracia...
    Muy bien.

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  2. Me encanta! XD
    Sobre todo como la niña maltrata a su bicho imaginaria gracias al razoncinio.

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  3. Y se volvió más cargante con cada año que pasaba... xD

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  4. Vaya,al final acaba con un toque de realismo,con lo que me estaba gustando el camino fantasioso que estaba tomando.

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  5. La gracia esta precisamente en el corte, supongo

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