-¿Después de todo lo que he hecho? ¡He sacrificado a mi familia por tí!
Joaquín suspiró tristemente. Ana siempre se ponía a la tremenda.
-¿Y qué quieres que haga? No te pongas así...
-¿Que no me ponga así?-Ana le lanzó una mirada furiosa-¡Serás cabrón!
-Mira, lo que pasó, pasó, pero...necesito un tiempo para pensarmelo.
Ana no podia creerlo. Le estaba dejando. Joaquín, su Joaquín.
-Vete a la mierda.
Se alejó a zancadas, con los ojos llenos de lágrimas. Había esperado que al menos intentara deternerla, pero no dijo ni una palabra. Caminó hasta su casa y abrió la puerta. Se sentó en el suelo.
-Lo he dado todo por tí-murmuró.
Miró en rededor, buscando a su amigo. Allí estaba, sentado en el sillón, como siempre. Se acercó y le lanzó una mirada desafiante.
-Dijiste que sería mío. Me mentiste.
-Oh, vamos. Dijimos tu familia. Aún te quedan dos abuelos y una tía.
-¿Qué haces con los corazones?
-¿En serio quieres saberlo?
La figura cornuda rió, y de su boca surgió un leve olor a azufre.
No es bueno pactar con el diablo... luego pasan este tipo de cosas.
ResponderEliminarEn los aquelarres, para hacerse colega del diablo había que darle un beso en una cara que tenía en el culo.
ResponderEliminarYa sabeis, si conoceis a alguien con una cara en el culo...desconfiad!
bueno consejo xD ¿util? :P
ResponderEliminarQuizás algún dia te salve la vida! xD
ResponderEliminarUmm, muy inquietante, jeje, mola ;)
ResponderEliminarQue bien que te haya gustado :)
ResponderEliminarEste está bastante gracioso.
ResponderEliminarAinsss Joaquin, la pobre chiquilla sacrificando gente y tu sin hacerle caso
Es que es una psicopata, leches xD
ResponderEliminarCalla, tu no comprendes el amor de la chiquilla
ResponderEliminarEs lo que tiene escribir un relato, que no comprendes en absoluto a los personajes... :P
ResponderEliminar